Procedimientos I

El día que lo iban a matar, Santiago Ruiz sabía que su camiseta corría riesgo de mancharse. No es porque la sangre no tuviera la capacidad decorativa del fernet con Coca-Cola del sábado a la madrugada, pero esa blancura era tan pura, tan lúcida, tan blanda, que hasta Gianola estaría tentado de mancharla.
Si vos pensás que la tradición es un fundamento estanco donde los pueblos van a apoyar las patas, te equivocaste de fuente, chabón. Entonces, navegar se hace preciso en charcos que nos lleven a Uruguay, Jamaica o Nueva Zelanda.
Hay en cada vanguardia un mundo, un texto, un palimpsesto y veinte o treinta y cinco palabritas técnicamente específicas más que quedan dulce en los concursos. ¡Ay, si yo pudiera ganar y ser un héroe! ¿Qué héroe sería? ¿Un Segismundo? ¿Un Sigfredo? No, yo soy Kovacci.
Cuando el lector se calle, el autor no va a tener más nada para decir. ¡No matés a la flor rosa de un plumazo de nada! Mejor procurá cogerte a la virgen antes de que los vírgenes te cojan a vos (en sentido figurado, Pedro). Y ahí está el error, ¿no ves? ¿No ves todo lo que estamos haciendo mal? Si no te veo es porque estoy mirando para el costado y a vos te gusta siempre tener la relevancia del centro de mesa.
En vos llamé rubí lo que mi abuelo llamara "alupita" y "cocoliche". ¿Quién es el lector de los perros de los martes? ¡No sé qué quiere decir la menor! ¿Qué me querés decir? Ya sé que Onda Vaga ahora es progre y kirchnerista y si no lo denuncio caerá del río un muerto con todo lo bueno, un ángel con todo lo humano. Y si al final, lo único que quiero es sumergirme con vos... irme con vos... ¡Hasta el fondo de las cosas!
22/05/15